Conociendo al Pudú y sus principales amenazas
En el presente artículo conoceremos a uno de los tres ciervos nativos que habitan en Chile y uno de los más pequeños del mundo: el Pudú. Asimismo, podrás enterarte de sus principales amenazas constituidas por la pérdida de su habitat, los ataques de perros y atropellos, y sobre una novedosa campaña iniciada por el centro de rehabilitación Chiloé Silvestre, que instalará señalética caminera en los puntos que presentan de mayores atropellos de esta especie en la isla de Chiloé, para lo cual inició una campaña de recolección de fondos.
DESCRIPCIÓN DE LA ESPECIE
El Pudú, más conocido en Chiloé como venado o venadito y cuyo nombre científico es Pudu puda, es una de las 3 especies de ciervos chilenos, junto al Huemul y la Taruca (Huemul del Norte). Asímismo es uno de los cérvidos más pequeños del mundo. Esta característica sería una adaptación para vivir en la densidad de la vegetación boscosa que habita.
Los animales adultos continentales pueden pesar en promedio 7,2 (5,8 a 9,5) kg y medir entre 79 (64 a 94) cm de largo, con una altura de 40 (34 a 46,5) cm a la cruz. Sin embargo, en Chiloé los Pudúes son más grandes, con un peso promedio de 9,3 (6 a 14), un largo de 84 cm (69,5 a 97,3) y altura a la cruz de 41 cm (32 a 49)
El Pudú adulto presenta un pelaje de color marrón, castaño o rojizo, variando la tonalidad según la región corporal y siendo más oscuro en los machos. Esporádicamente se han visto Pudúes albinos en Chiloé. Las crías, al igual que todos los ciervos, nacen con manchas blancas o amarillentas en hileras que desaparecen entre los 3 a 5 meses.
Pudú Adulto
Los machos se diferencian de las hembras por presentar unas astas simples de hasta 10 o un poco más cm de longitud que cambian cada año. La época de apareamiento es entre marzo y abril, con una gestación promedio de 203 días, generando partos desde octubre a diciembre Cada hembra da a luz una sola cría con un peso que varía entre los 700 a 1.100 g. También se han reportado hembras con dos crías.
Estos ciervos son por lo general solitarios y territoriales, permaneciendo la madre con su cría hasta los 8 meses de edad aproximadamente.
Cría de Pudú
El hábitat chileno para el Pudú son bosques húmedos y sombríos de la Cordillera de los Andes y de la Costa donde prefiere zonas de mayor densidad en la que abunda la Quila, que le provee de refugio, alimento y túneles por los cuales pueden moverse casi a máxima velocidad cuando escapan de las amenazas.
Es muy adaptable a consumir alimento dependiendo del hábitat donde se encuentre, Su dieta incluye una gran diversidad de especies asociadas a los bosques comiendo las partes más nutritivas de las plantas nativas compuestas de hojas jóvenes y brotes de árboles, arbustos y hierbas. incluyendo además helechos. Lugareños en Chiloé comentan que el Pudú engorda a inicios de otoño debido al gran consumo de avellanas nativas (Gevuina avellana) Puede comer también Plántago, Lotus y Dactylus, zarzamoras, rosas, manzanas, fresas, castañas, avellanas, bellotas, papas topinambur, zanahorias, apio, trébol rojo y blanco, en cautiverio.
P. puda se distribuye geográficamente en Chile desde los 36ᵒ hasta al 49ᵒ de latitud Sur correspondiente al sur de la Región de Maule y la Región de Aysén respectivamente y, en Argentina, en zonas adyacentes a Chile, desde 39ᵒ S hasta los 43ᵒ S.
En el año 1982 se estimó una población de 10.000 individuos, aunque hasta la fecha no hay estimaciones basadas en datos de campo. Sin embargo, considerando los remanentes de bosques entre la región del Maule y Los Lagos es probable que la población actual del Pudú exceda la cifra.
La especie es abundante en Chiloé donde es frecuentemente avistado, atropellado y detectado en cámaras trampas, de la misma manera que animales en la Cordillera de la Costa en la Región de los Lagos, Los Ríos y en Nahuelbuta. La abundancia en Chiloé podría estar determinada por la ausencia de grandes depredadores, como el puma, siendo el zorro chilote, que lo depreda eventualmente.
Pudú adulto rescatado
AMENAZAS
Si bien el Pudú fue clasificado por el Reglamento de Clasificación de Especies (RCE) de Chile como “vulnerable”, la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) actualmente lo clasifica como “casi amenazado”, debido a que la estimación poblacional no está respaldada por datos cuantitativos.
La principal causa de disminución poblacional es el deterioro del hábitat debido a la actividad humana como la deforestación, monocultivos y agricultura. Por otro lado, muchos Pudúes se ven severamente afectados por los atropellos en carreteras y el ataque de perros, siendo las causas más comunes de ingresos de Pudúes en los centros de rehabilitación de fauna silvestre, mostrando un aumento progresivo en el ingreso de ellos cada año. El año 2021 llegaron al centro de rehabilitación de fauna silvestre de Chiloé-Silvestre 30 Pudúes y solo en los 3 primeros meses del año llevamos de 2022 llevamos 22 ingresos.
Pudú muerto en atropello
Pudú atacado por perro previo a una intervención quirúrgica
Como causas secundarias de amenazas, tenemos la caza, la explotación para piel o carne como parte suplementaria de la dieta de trabajadores rurales y la introducción de enfermedades transmitidas por animales de granja.
A esto se suma la escasa o casi nula participación de organismos públicos en el rescate y transporte de estos animales al centro de rehabilitación, sobre todo en Chiloe.
CHILOÉ-SILVESTRE
Somos una ONG ancuditana que se dedica a la educación ambiental, a la rehabilitación de fauna silvestre y a la investigación. Gran parte de nuestro trabajo la realizamos con voluntarios que llegan de todo Chile y el mundo a a vivir y convivir con nosotros en un ambiente grato y rodeado de naturaleza, pues estamos ubicados en la Reserva Marina Pullinque, en Ancud.
Logo Chiloé Silvestre
Iniciamos nuestras labores en el año 2009 rehabilitando fauna silvestre de todo Chiloé. Hoy contamos con un centro educativo y el único centro de rehabilitación de fauna silvestre en el archipiélago, recibiendo más de 500 animales en los últimos 5 años.
Desde nuestros inicios y hasta ahora el número de animales silvestres que ingresan a nuestros Centro de rehabilitación ha ido en aumento constante llegando a 154 animales el año 2021 correspondientes a un gran número de especies silvestres nativas, tanto marinas como terrestres, destacando el Pudú, Zorro Chilote, Monito del Monte, pingüinos, lobos marinos, tortugas marinas, Güiñas, Cisne de Cuello Negro, rapaces diurnas y nocturnas entre muchas otras. Lamentablemente lo que llevamos del año 2022 hemos recibido la mitad en número de animales de todo el 2021, es decir 77, y aún quedan 9 meses.
Respecto a los venados, el 2021 ingresaron 30 animales la mayoría de ellos atacados por perros o atropellados, aunque el número de animales muertos en Chiloé es bastante más elevado debido a que la mayoría de los atropellos terminan con la muerte de estos animalitos en el lugar del accidente. Entre enero y marzo de 2022 ya han ingresado 22 animales, la mayoría de ellos atropellados, mostrando un notorio aumento en los últimos años y en particular este inicio de año 2022.
Pudú recibiendo tratamiento
En nuestro centro educativo realizamos charlas y talleres a quienes nos visitan, enfocándonos principalmente en establecimientos educacionales de la provincia, con el objeto de dar a conocer nuestra fauna silvestre, los problemas de conservación que ellos presentan y las medidas que, como ciudadanos, podemos tomar para minimizar sus amenazas.
Dentro de nuestro centro educativa tenemos algunas especies de fauna silvestre que no se han podido rehabilitar, por diferentes razones, como la pudini, un Pudú de 4 años de edad que reside con nosotros y forma parte de nuestra guía educativa. Es por esto que el llamado es a agendar visitas con nosotros para recibir charlas, talleres y una visita guiada por nuestro sendero educativo que bordea la Reserva Marina Pullinque en Nal bajo de la comuna de Ancud.
Retrato de Pudini
CAMPAÑA ACTUAL
Debido a la gran cantidad de atropellos de Pudú que ha ido en aumento significativo desde el 2020, nos hemos asociados a otras agrupaciones chilotas que buscan el mismo fin, que es proteger a la fauna silvestre de Chiloé. Es así que con Defendamos Chiloé y Chiloé-Protegido estamos armando una campaña para realizar la instalación de letreros preventivos o de alerta en las distintas carreteras y caminos que existen en Chiloé.
Para ello hemos identificado los principales puntos de accidentes, es decir , los puntos en los caminos donde ocurren la mayor cantidad de atropellos de Pudú, para instalar señalética y de esta forma alertar al conductor a una mayor precaución en las vías.
Puntos en que se instalará señalética
Esta campaña va en búsqueda de fondos para poder hacer e instarlos los letreros, ya que no nos ha ido muy bien con las autoridades, aunque las conversaciones siguen activas para poder financiar este proyecto.
Señalética caminera
Se ha dispuesto la cuenta de Chiloé-Silvestre para recibir las donaciones:
Artículo redactado por Javier Cabello de Chiloé Silvestre